Alex no había hecho más que despertar y el apetito comenzaba a llamar a su puerta, hacia varios días desde su última cena y el hambre era una sensación difícil de aguantar para una de su especie. Camino en dirección a la ducha para desentumecer un poco sus músculos sentir la extraña sensación del roce del agua, esa sensación que tanto disfrutaba en vida y que ahora solo era un recuerdo en su memoria.

Enfundada en una toalla camino por el parquet de su pequeño apartamento en dirección a el armario, enfundándose un vestido oscuro con alguna transparencia.

Ropa:

Un poco de perfume sobre su piel y los zapatos de tacón era lo único que necesitaba para dirigirse a la puerta de su apartamento y tomar el taxi que había llamado momentos antes, después de todo era absurdo llevar vehiculo propio, no iba a regresar sola a casa, y seguro que su juguetito seria capaz de llevarla a casa.

El camino hasta el pub fue bastante tranquilo, pese a que el conductor del taxi tratase de ligar con ella, no era su tipo y de por seguro ni su sangre tendría buen sabor.

La noche ya hacia tiempo que había llegado y el pub comenzaba a tener bullicio, camino en dirección a la barra y apoyándose en ella busco con la mirada alguna presa que llamara su atención aunque nadie parecía ser merecedora de sus sentidos, se giro y pidió una copa, al menos mojaría sus labios en algún liquido en espera de el dulce y ferrosos sabor de la sangre.