Hace muchos siglos, en un intento de mantener un balance en la tierra, las razas predominantes en la tierra, crearon 9 reliquias, cada una protegiendo a un pilar y este a su vez, manteniendo en equilibrio todas las fuerzas sobrenaturales. Se vivió en paz por algún tiempo, pues aunque los ataques entre razas se seguían llevando a cabo, estas no alteraban el orden natural y no pasaban a ser más que leyendas que se contaban de padres a hijos y la vida pudo seguir su curso. Sin embargo, y como estas reliquias poseían un gran poder, la ambición comenzó a aparecer en los corazones inmortales, y fue cuando una guerra se desató por poseerlas, dando como resultado que las reliquias fueran sepultadas en un lugar lejos de malas intenciones y en un paradero desconocido… para casi todos.

El caos y la muerte empezó a esparcirse sin control, las fuerzas de la luz y las de la oscuridad luchaban por ganar territorio entre los humanos, unos protegiéndolos, otros destruyéndolos, mientras que otras razas nobles, solo luchaban por tener un lugar en la rueda de la vida.

Mucho tiempo y vidas se perdieron en esta situación.

Hace tiempo, cuando la sociedad europea comenzaba a florecer, la ciudad portuaria de Brujas, en Bélgica, obtuvo gran poderío comercial gracias a su localización. Muchos dicen que sus primeros pobladores hicieron un pacto con el diablo… u otros seres.

En esa zona, se decía que habitaba una antigua raza de criaturas, y que le motivo por el cual Brujas posee sus numerosos canales, es para permitir que estos seres se muevan a gusto y con libertad. Los leviatanes, como fueron conocidos por su carácter volátil y su cola de serpiente marina, procuraron la ciudad, brindando pesca, tesoros y a cambio solo pidieron huéspedes humanos con los cuales fusionarse usando las reliquias de su raza.

La verdad es que la ciudad prospero ampliamente durante siglos, hasta que el crecimiento de la población acabo por aislarla, quedando en el olvido. Aun así, se mantuvo aunque a menor esplendor que en el pasado. Poco a poco, los leviatanes fueron quedando dormidos en las profundidades de los canales donde se rumorea, que existe la ciudad de R'lyeh, donde ellos moran esperando el momento adecuado para resurgir y reclamar sus territorios una vez más.

Raziel y Lelahel fueron enviados a la ciudad de Brujas a intentar dar con el paradero de las reliquias, para devolverlas todas juntas a su lugar de origen y así poder una vez más restaurar el balance. Sin embargo en la ciudad ya se habían establecido otras criaturas con el mismo propósito, pero diferente finalidad. Así es como la guerra llego a la pequeña ciudad, donde, por rumores, se dice que las reliquias se encuentran ocultas.

Lucifer también se presentó, así como Nix, y otros inmortales de gran poder, en busca todos del único ser que sabe dónde se encuentran: aquel que las sepultó.

Sin embargo, y a pesar de los intentos por localizar a la criatura poseedora de tal conocimiento, las naturalezas de las razas, que las hacen conflictivas entre sí, les impidieron por más de 100 años enfocarse en la búsqueda.

Ha pasado ya un tiempo desde que la ciudad cayó en la oscuridad, donde la luz prevalece a punta de esfuerzos y plantar cara, empleando métodos un poco diferentes a los comunes, protegiendo a los humanos que siguen en el medio de la lucha que no se puede ganar, pero que se debe pelear.