Era una buena noche para que todos los habitantes de la mansión compartieran, ya que una de las jóvenes que vivía en esta cumplía años ese día. El joven mestizo Berrik tomaba varios bocadillos y chuchería de una gran bolsa plástica negra que estaba llena de este en el suelo de la cocina y las llevaba en una habitación de nivel sótano que estaba especialmente organizada y equipada para realizar eventos como este. Al llegar a esta habitación bajo las escaleras para llegar, empezando a colocar los bolsas de frituras y bocadillos sobre una de las mesas en un orden que se vieran semi-presentaba para ser simplemente unas bolsas de frituras y uno que otro invento culinario que el mestizo saco de internet para saber que se daban en las fiestas de cumpleaños, ya que realmente en el orfanato donde creció no se daban fiestas ya que nadie sabía cuando cumplía años.

Se acerco a un refrigerador horizontal que estaba lleno de latas de refrescos y bebidas alcohol también para los que desearan tomaran esa noche algo de alcohol, aunque el joven mestizo ya era mayor de edad no era un persona que se viera tomando bebidas de ese tipo, aun para su forma de ser se le podía ver tomando refrescos y cosas similares. Por lo cual simplemente tomo una lata de cola para luego dirigirse al equipo de sonido el cual prendió, haciendo que la música inundara la sala completamente por el ritmo de la canción.

Caminaba tranquilamente por la mansión mientras se dirigía hacia su habitación, tomaba tranquilamente de la lata de cola mientras escucha sonido provenir de la cocina, lo más seguro era que uno de los habitantes de la mansión que se había ofrecido a realizar el pastel de cumpleaños estuviera terminándola, por lo cual  pensó en mejor no molestar y continuar con dirigirse hacia su habitación para cambiarse de ropa.  

Asi que luego de un cuarto de hora el joven mestizo volvía a la habitación de eventos. –Buenas noches a todos. Saludaba a lo lejos a todos los que habia llegado a la habitación mientras bajaba de las escaleras.

Vestimenta:

El cumpleaños de un Bigeneri no puede ser olvidado, mucho menos si es al doble. Si, era cierto que yo no tenía mucho tiempo de haber entrado al clan, era ciertamente un novato, pero curiosamente me había encariñado con cada uno de los miembros del clan, ¿eso era un clan cierto?  los integrantes del clan, me habían recibido muy bien, el primer día al llegar me encontré con una amable señorita , menor que yo pero mas alta en experiencia claro, esa chica era la chica del cumpleaños, desde que la conocí tanto a la señorita Daenerys como a la señorita Astrid las consideraba mis hermanas pequeñas, usualmente a la señorita Astrid la escondía detrás de mi espalda y a Daenerys, bueno ella no era necesario esconderla pero platicaba a menudo con ella cabe mencionar que con la señorita Daenerys me lleavaba bastante rudo, pero esa era nuestra forma de llevarnos. Bah Garth, déjate de tonterías sabes que quieres hacerlo  –  Ah no, no –   dije al aire, me encontraba tirado en el suelo, en algún lugar de la mansión Bigeneri bueno no ciertamente en cualquier lugar, era un lugar que había adoptado y siempre me encontraba ahí cuando estaba aburrido –  Bah, se que quiero; hace mucho que no hago uno de esos –   me puse de pie del suelo y me sacudí un poco la ropa, habría una gran fiesta debido al cumpleaños de la señorita, antes de que empezara la fiesta me dedicaría a elaborar un gran y delicioso pastel, no por nada mi madre me había enseñado a elaborar pasteles.

Agachado sacando ingredientes de la gran nevera para hacer la tarta, así me encontraba en este preciso momento, ¿sería bueno hacer la tarta  de chocolate o de vainilla sería mejor?. Guiándome tontamente por mis instintos decidí no elaborar el pastel de ninguno de esos saberos, nada de eso, ya sabía que pastel hace;  una vez obtuve todos los ingredientes para elaborar un pastel me dispuse a comenzar el pastel–   bien, si no mal recuerdo tomabas esto, esto y esto y lo mezclas –  me dije a mi mismo señalando huevos, aceite y agua, los tome y comencé a ahora si elaborar la deliciosa tarta tendría que quedar deliciosa, así a todos los que vendrán les va a gustar, continúe elaborando la mezcla para el pastel por quince minutos mas y después de colocarla en un molde y meterlo al horno me quite el “varonil “ mandil que traía puesto, lo coloqué en una silla y corrí a cambiarme la ropa, no podía llegar manchado de harina a la fiesta, una vez me coloqué un buen atuendo bajé hasta la cocina observando como el pastel iba horneándose –  cinco minutos más –   me dije a mi mismo y después de que los cinco minutos pasara saqué la tarta del horno para llevarla hasta la sala de eventos que era donde tendría lugar la fiesta, tomé el pastel entre mis brazos y me dirigí hasta la sala de eventos una vez llegué, bajé las escaleras y coloqué el pastel en una mesa que ahí se encontraba, observe a mi alrededor y no conocía a nadie de los presentes, realmente debía empezar a conocer gente…

Pastel~:

Vestimenta :

¡Fiesta!¡¿Fiesta?! Astrid movía incesantemente su pie contra el asfalto del lugar, ella estaba consciente de que llegaría tarde, odiaba llegar tarde pero no tenía salida, justo hoy presentaba un proyecto estudiantil, colocándose el cabello detrás de las orejas esperaba la calificación de su proyecto, miraba el reloj ubicado encima de la pared que tenía al frente, hasta que escucho el carraspeo de la garganta de su profesor, el hombre barbudo hablo por primera vez en algunos 51 minutos… ¡Si los estaba contando!, después de unos segundos de audible tensión, los músculos del profesor se relajaron y dejo ver una señal de aprobación. Tomos sus cosas apresuradamente despidiéndose de los demás con su característica y muy alegre sonrisa, si ella podía ser un tipo de persona diferente, ni que lo digan pero jamás perdería esos aspectos de su vida.

Antes de abordar el transporte paso por la pastelería. Siempre visitaba ese lugar, ella era capaz de pasar horas allí comiendo cualquier tipo de postre y claro su favorito, como siempre esa la usual tarta de fresas, ''Nada de tarta de fresas, nada de tarta de fresas'' repitió el mantra esperando unos pastelillos de chocolate, si vas a llegar tarde entonces no hay nada mejor que llegar con dulces. Sonrió cancelando la cuenta, salió disparada y aun con tacones podía correr ''¡Eso es habilidad, Astrid!''.

Tomo el autobús, la dejaba unas calles alejada de la mansión, aun no era capaz de confesar que estaba viviendo allí, por cuestiones de respeto a los demás miembros del clan, empujo el protón haciendo  el clásico ruido de las bisagras al abrir. Apuro su caminar, pasos y más pasos hasta estar frente al salón de eventos, luego de un suspiro entro al salón con una sonrisa. –Hey ¡Buenas noches a todos!– camino hasta los demás, –Felicidades Daenerys– coloco los pastelillos sobre la mesa, parecía que no estaba tan tarde como imagino. Miro sus  compañeros, ella sin lugar a dudas aún no se adaptaba ni al estilo de los demás ni al de la casa, seguía siendo la misma chica de siempre y eso parecía ser un motivo para deprimirse, sin embargo a ella simplemente le encantaba ser de esa manera. –¡Que alivio no haber llegado tarde!– comento divertida llevando su mano hasta la altura del corazón y sonriendo aliviada.

Miro a todos los lugares esperando que tipo de fiesta eran capaces de organizar, todas las personas allí eran conocidas para ella, incluso de vista a pesar de no compartir muchas palabras, no era callada ni  mucho menos tímida así que no le molestaba compartir con todos aquellos que estuvieran dispuestos a hablarle.

Berrik estaba feliz como no lo había estado en mucho tiempo, aunque a lo mejor no se le notara por su expresión tranquila y calmada que hasta a alguno podrían llegar a considerarla fría. Se acerco al mayor quien había entrando con el pastel en brazos, él quería ayudarlo con llevarlo hasta la mesa al menos aunque al parecer fueron más rápido que el. –Se ve sabroso el pastel, Garth-Hyung. Dijo tranquilamente mientras observaba el pastel de cumpleaños. –Muchas gracias por encargarse de hacerlo. De seguro a la cumpleañera le gustara. Comento para que luego para darse cuenta que la cumpleañera llegaba. Se acerco a la joven cumpleañera en compañía del mayor. –Feliz cumpleaños Daenerys. La felicito el mestizo con una pequeña pero sincera sonrisa en su rostro. –Por cierto, Hyung ella es la cumpleañera DaSom, DaSom el es HoonMin, no sé si lo habrás visto en la mansión pero también vive aquí y fue él quien se encargo de realizar su pastel. Dijo en un tono medio alto de voz aunque realmente no sabrían si lo podrían escuchar realmente por el alto volumen de la música.

Luego de un rato de charla en la fiesta, Berrik lo sintió, sintió la presencia de energía híbrida de alguien nuevo para él en la mansión. Así que sin darse cuento se alejo de mayor y la joven cumpleañera sin decir una sola palabra al respecto, empezando caminando hacia esa persona sin siquiera estar presente en la misma habitación, solo lo percibía a través de su energía. Al final e detuvo por unos segundos sabiendo que esa persona aparecería en cuestión de nada y así fue. 


–Eh? Escapo de su boca, al observa un chico más joven que él o eso le parecía.  –Usted Le dijo a la persona que aparecía en escena mientras el joven mestizo hacia algo de memoria. –Cierto, debe ser la persona de quien me hablo IU-Noona, es Herny? Le pregunto ya tranquilo al recordar que IU le había comentado que aunque no podría asistir a la fiesta, ella había invitado a alguien a la fiesta. –Soy Berrik, mucho gusto. Se presento después de todo.

Para Berrik eso era algo realmente raro en IU, tal vez se podría esperar de Astrid quien para él era una persona que puede sorprender fácilmente a cualquiera.  –Pensando en Roma y el Rey se asoma. Dijo aunque no estaba seguro que esa fuera la forma en que se decía, aunque la razón de haber dicho aquellas palabra fue que el joven mestizo observo el llegar a la fiesta a la Astrid. –Por favor, venga conmigo. Le dijo a la persona con la que se encontraba para luego unirse al otro grupo. –Astrid-Noona, llego puntual, me alegro por eso. Por cierto, el es Henry. Lo presento ante todos para luego hablarle especialmente a Astrid. –Su hermana lo invito, lástima que ella no pueda estar esta noche con nosotros.

Gire la mirada a un lado y me lleve una gran sorpresa al encontrarme con el líder y agachando un poco mi mirada sonreí al escuchar lo dicho por el joven pero fuerte chico – oh, muchas gracias Berrik, lo hice con cariño para la cumpleañera –  sonreí nuevamente hasta que recordé el golpe que me había propinado Daenerys horas antes – voy a embarrar todo el pastel en la cara –susurre para mí en un tono casi inaudible y seguido observé como Daenerys y quien trataba ya como una hermana entraba al gran salón donde nos encontrábamos, me acerque a ella siguiendo a Berrik lentamente a sus espaldas claro no sin que él no se diera cuenta; una vez nos acercamos más a ella escuché con atención lo que el líder comentaba y asentí levemente con mi cabeza – si, anteriormente ella me ha visto recorrer los pasillos de la mansión ella a mi tanto yo a ella – respondí con una leve sonrisa en el rostro mientras detrás de Berrik observaba a Daenerys y le hice un gesto con la cara – yah, ¿quieres morir –  susurré en un tono muy bajo solo para que Daenerys lograra leerme los labios y lo que intentaba decir.

–yo me retiro joven Berrik,  Daenerys – sonreí levemente e hice una reverencia únicamente con la cabeza –  nos vemos después – después de eso simplemente regrese a donde había dejado el pastel hecho por mí y lo observé; realmente tenía hambre pero Daenerys debía ser la primera persona que probara ese pastel por lo cual decidí alejarme de aquella dulce tentación y adentrarme por ahí dentro del gran salón hasta que vi entrar a alguien que al parecer era un nuevo miembro en la mansión esa era mi primera opción ya que realmente nunca antes lo había visto por los alrededores y mucho menos dentro del consideraba ya mi hogar; el hambre que tenía en esos momentos era tanta que incluso estaba pensando en ir y picar algo de la nevera y así lo iba a hacer hasta que observé como una persona más se agregaba a la fiesta era Astrid  –Buenas noches señorita Astrid –hice una leve reverencia y observé los pastelillos que cargaba con ella –  eso es talento –me dije a mi mismo antes de salir por la gran puerta para ir hasta la cocina, no me iba a quedar con hambre, caminé hasta la gran puerta tomé la perilla pero la solté al instante recordando que estaba en una fiesta; debía haber comida – Hoon Min, ¿Qué es lo que pasa hoy, tanto te afectó el golpe? – me pregunté a mi mismo, a veces era bastante usual encontrarme hablando solo, después de mi breve soliloquio decidí caminar hasta la nevera horizontal que se encontraba por ahí pero antes jalé a Daenerys conmigo tomándola de un brazo, realmente nunca antes la había visto tomar y la curiosidad me salía casi por los poros, la arrastré conmigo y abrí la nevera horizontal – hoy beberás conmigo pequeña Daenerys –  tomé dos bebidas alcohólicas de la nevera horizontal no era necesario alguna clase de artefacto que las abriera, simplemente con girar la ficha hacia cierto lado, tenías tu bebida; una de las que tomé se la extendí a Daenerys – enjoy – dije con un característico inglés mío mientras dejaba la bebida en manos de la menor.